Cubalex ha informado sobre la alarmante situación del preso político Alexander Díaz Rodríguez, encarcelado por las protestas del 11 de julio de 2021, actualmente recluido en el campamento de trabajo forzado La Conchita, en la provincia de Pinar del Río. Alexander, quien padece cáncer en la garganta, enfrenta una severa desnutrición y un deterioro progresivo en su salud.
A pesar de su frágil estado de salud, las autoridades le han forzado a trabajar y han rechazado su solicitud de licencia extrapenal, amenazándolo con trasladarlo a un régimen más severo si se niega a trabajar. Durante su reclusión, ha sido objeto de agresiones físicas que han comprometido aún más su integridad física. A principios de año, fue brutalmente golpeado por guardias de la prisión Kilo 5 y medio, exacerbando su situación.
Alexander ha enfrentado numerosos episodios críticos de salud sin recibir el tratamiento médico necesario. Reporta haber sido inyectado con agujas despuntadas, lo que ha causado un dolor adicional e innecesario, además de lesiones. Actualmente ha perdido la capacidad de hablar y depende de otros reclusos para comunicarse.
Las autoridades también han coaccionado a su familia, específicamente amenazando a su madre para que deje de denunciar las injusticias que su hijo enfrenta. Además, se le ha negado el acceso a visitas y la recepción de provisiones esenciales. Recientemente, un oficial le impidió recibir alimentos, ropa y productos de aseo, justificando la negativa con acusaciones de que son “productos contrarrevolucionarios fabricados por el imperialismo”.
El caso de Alexander Díaz Rodríguez es un ejemplo flagrante de las violaciones de los derechos humanos que persisten en Cuba. Es imperativo que la comunidad internacional tome conciencia de estas prácticas abusivas y presione para que se respeten los derechos fundamentales de los presos políticos.